TIEMPO DE ESPERA
I
Beso esta tierra que me oculta las promesas.
Cierro la caja de los sueños,
la lanzo la mar.
y desaparece en el olvido
como una historia vulgar.
Sin embargo el amor flota en el horizonte
y hacia él me embarco de nuevo
en un otoño inmaculado
cuando llega la tarde
como un beso
Cierro la caja de los sueños,
la lanzo la mar.
y desaparece en el olvido
como una historia vulgar.
Sin embargo el amor flota en el horizonte
y hacia él me embarco de nuevo
en un otoño inmaculado
cuando llega la tarde
como un beso
II
Vuelvo la mirada y te veo.
Vuelvo al paraje del olvido
como un autómata,
y como una estrella
con miles de puntas
volteo concéntricamente hasta el amanecer.
Sin embargo los autómatas,
entre rencillas sin sentido
comienzan su rebelión
y sucumben ante la soledad.
Vuelvo al paraje del olvido
como un autómata,
y como una estrella
con miles de puntas
volteo concéntricamente hasta el amanecer.
Sin embargo los autómatas,
entre rencillas sin sentido
comienzan su rebelión
y sucumben ante la soledad.
III
Los recuerdos se transforman como las nubes,
tan solo un instante y desaparecen.
La mirada ensangrentada
se duele de Amor
y todo permanece obsoleto,
hasta los sueños…
La oscuridad se expande entonces en ese vacío donde la espera
acaba con la fantasía
y surge el rencor como un arma infalible .
Sin embargo el Poema me protege de ese barullo infernal
que me atropella constantemente,
ahí, donde el recuerdo se revela,
en esa novela
donde los personajes se pierden
y el autor huye despavorido .
tan solo un instante y desaparecen.
La mirada ensangrentada
se duele de Amor
y todo permanece obsoleto,
hasta los sueños…
La oscuridad se expande entonces en ese vacío donde la espera
acaba con la fantasía
y surge el rencor como un arma infalible .
Sin embargo el Poema me protege de ese barullo infernal
que me atropella constantemente,
ahí, donde el recuerdo se revela,
en esa novela
donde los personajes se pierden
y el autor huye despavorido .
IV
Perdida entonces en la inmensidad del Océano,
olvidada, asombrada ante la vida,
mi nombre se desvanece en el tiempo
y sin embargo,
se enciende con el fuego.
Y la Soledad,
como un susurro, se resquebraja
olvidada, asombrada ante la vida,
mi nombre se desvanece en el tiempo
y sin embargo,
se enciende con el fuego.
Y la Soledad,
como un susurro, se resquebraja
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